La Bienal Internacional de Danza de Cali ha sido desde su creación un escenario para propuestas de investigación, creación y diálogos entre artistas colombianos y extranjeros, con especial interés en diversas miradas en torno a la diáspora africana en nuestro país, sus estéticas, poéticas y desarrollos dancísticos. Compañías nacionales como Sankofa Danzafro, Wangari, Herencia Africana, Jóvenes Creadores del Chocó y Atabaques, entre otras, han hecho parte del programa de la Bienal, visibilizando estas búsquedas, potenciando los procesos de investigación y creación de la perspectiva afrocolombiana, y sobretodo, aportando una mirada reflexiva y crítica que ha puesto en valor y posicionado las danzas tradicionales y afro contemporáneas en Colombia.
Igualmente, artistas como Georges Momboye, Germaine Acogny y la investigadora afroamericana Kariamu Welsh entre otros , han sido invitados a Cali para dialogar con artistas nacionales y locales, para aportar al pensamiento y maduración de esos nuevos lenguajes globales, que conlleven al respeto por la memoria histórica de los pueblos afrodescendientes y su reparación simbólica, en el camino a la construcción de una identidad nacional plural, diversa, que reconozca esta herencia que deviene de la diáspora como pilar fundamental de nuestra Nación. En este sentido, Proartes y la Bienal Internacional de Danza de Cali se unen a la celebración del día de la afrocolombianidad, como escenario nacional para celebrar 172 años de libertad.
En 2022 la Compañía Wangari ha sido reconocida como ganadora de la Beca de mediana trayectoria de la Bienal y estrenará la obra “La verdad Negada” en el marco del evento. Igualmente, Sankofa Danzafro ha sido comisionada para crear la obra que dará apertura a la Bienal el próximo 7 de noviembre. Rafael Palacios, director de Sankofa e Yndira Perea, directora de Wangari, nos envían estos mensajes en este día tan importante para el país.
De esta manera se continúa afirmando el compromiso de la Bienal con las comunidades afrodescendientes de nuestro país y sus manifestaciones dancísticas tradicionales y contemporáneas, confirmando la importancia de su valoración e inclusión para el posicionamiento de una nueva identidad nacional desde la danza.